Pizza de queso casera: Receta italiana fácil de preparar [VIDEO]
La pizza es uno de los alimentos más populares en todo el mundo. Las variaciones de recetas de masa y coberturas son infinitas para todos los paladares. ¡Aprende a preparar esta increíble receta de Pizza de queso casera que te sorprenderá con su exquisito sabor!
- Tiempo de preparación: 60 minutos - Tiempo de cocción: 25 minutos
- Porciones: 10 porciones - Nivel de dificultad: Fácil
La harina que estás a punto de utilizar puede estar necesitando de la tamización que permite la separación de posibles impurezas y evita grumos secos en la masa final sea horneada o no. Este proceso se logra fácilmente pasando la harina a través de un colador.
Además, mediante el tamizado de harina se podrán eliminar los grumos procedentes de la humedad del ambiente o el empaquetado, las partículas de harina no solo se separan sino que también se airean. Por ejemplo, este punto de “aire” ayuda a que los bizcochos resulten más esponjosos.
INGREDIENTES
Masa
- 3/4 taza (177 g) de leche
- 1/4 taza (60 g) de agua tibia a 110° F (43° C)
- 1 cucharada de aceite de oliva
- 2 tazas (473 g) de harina de todo uso
- 1/8 taza (30 g) de maicena
- 1 1/8 cucharadita (5,5 g) de levadura seca
- 3/4 cucharadita (1 g) de sal
- 1/4 cucharadita de levadura en polvo
- 1/4 cucharadita de azúcar
Salsa y aderezo
- 7 oz (200 g) de tomates en cubos enlatados. Escúrrelos y reserva 1/4 taza (60 ml) de jugo líquido.
- 1/2 cucharada de aceite de oliva + 1 cucharada para rociar la masa de pizza antes de hornear
- 1/2 cucharada de pasta de tomate
- 1 diente de ajo picado
- 1/2 cucharadita de orégano seco (o 1/2 cucharada fresca picada)
- 1/8 cucharadita de hojuelas de pimiento rojo
- Sal y pimienta para probar
- 1 taza (236 g) de mozzarella fresca rallada
- 1/4 taza (60 g) de queso parmesano rallado
- 1/8 taza (30 ml) de leche
PREPARACIÓN
Masa
- Precalienta el horno con una piedra para hornear adentro a 500° F (260° C) durante aproximadamente 40 minutos a 1 hora, dependiendo de su horno.
- Combina leche, agua y aceite.
- En una batidora, combine a velocidad media el azúcar, la levadura, la sal, el polvo de hornear, la maicena y la harina.
- Agrega la mezcla líquida anterior a los ingredientes secos y mezcle durante unos 5 minutos. La masa estará húmeda y se adherirá a los lados del tazón de la batidora.
- Transfiera la masa a un tazón rociado con aceite, cubra con una envoltura de plástico o una toalla limpia y deje crecer a temperatura ambiente durante aproximadamente 1 hora, o hasta que la masa duplique su tamaño.
Salsa y aderezo
- Pulse los tomates escurridos y el jugo reservado en una licuadora hasta que esté molido grueso, solo un par de pulsos.
- Caliente el aceite hasta que hierva a fuego lento, agregando la pasta de tomate. Cocínalo hasta que empiece a dorarse, aproximadamente 2 minutos. Agregue ajo, orégano, hojuelas de pimienta y revuelva durante 30 segundos. Agregue los tomates triturados, lleve a fuego lento y cocine hasta que se reduzca a aproximadamente 3/4 de taza, aproximadamente 10 minutos.
- Sazone con sal y pimienta al gusto y deje enfriar.
- Mezcle el parmesano y la mozzarella con mitad y mitad hasta que estén bien combinados.
- Con las manos bien engrasadas, presione la masa para formar un círculo de aproximadamente 12 pulgadas de diámetro.
- Pon 1/2 taza de salsa sobre la masa dejando un borde alrededor del borde.
- Cubre con la mezcla de queso.
- Pinta los bordes con aceite de oliva.
- Desliza la pizza sobre la piedra para hornear/bandeja y hornee durante 15-20 minutos hasta que el queso burbujee y la masa esté bien dorada, girando una vez a la mitad. Deja enfriar durante 5 minutos en una rejilla para enfriar antes de servir. ¡Disfruta!
CONSEJOS
- Puedes cubrir tu pizza con más queso del que dice esta receta, a tu gusto.
- Una de las cosas más importantes que deben tenerse en cuenta cuando se prepara una pizza es la masa bien horneada.
- Es crucial poner su masa de pizza favorita en un horno bien precalentado a 500° F o 260° C para obtener la corteza perfectamente cocida y la cobertura no demasiado cocida.